José Antonio es estudiante de 2º del Doble Grado en Economía y Administración y Dirección de Empresas en la Universidad de Málaga. Fue participante del I Torneo Interno ADUMA, y del XI Torneo 3 Culturas de Córdoba, siendo finalista en este último torneo. Este año dejaba atrás la pantalla del ordenador para estrenarse en los atriles de manera presencial junto a su equipo Platón en el II Torneo Interno de ADUMA donde se proclamó semifinalista y, a título individual, Mejor Orador del torneo.
Hoy charlamos con José Antonio para que nos cuente cómo ha vivido esta experiencia y repasaremos lo que ha significado este torneo para él.
«Ganar el premio a mejor orador del torneo es una recompensa a todo ese trabajo y a toda esa práctica que se ha realizado durante el periodo de formación.»
Pregunta: Jose Antonio, en primer lugar, felicitarte por tu título de Mejor Orador del II Torneo Interno ADUMA. ¿Qué se siente al ganar un premio de estas características?
Respuesta: Se siente mucha felicidad, mucha alegría, y sobre todo mucha satisfacción a nivel personal. El mes anterior a un torneo de debate es un mes donde uno no para de trabajar, donde uno está todo el día pensando en la pregunta del torneo, en nuevas ideas, nuevos argumentos, buscando evidencias y es un mes donde también se practica mucho, se practica para hacer una buena intervención y para quedar tú personalmente satisfecho de tu propio trabajo. Ganar el premio a mejor orador del torneo es una recompensa a todo ese trabajo y a toda esa práctica que se ha realizado durante el periodo de formación y la posibilidad de ganar este premio es algo que ni se me había pasado por la cabeza, especialmente perteneciendo a una asociación donde hay un gran nivel. Ganar este trofeo supone en resumen una gran satisfacción personal, es algo que me hace muy feliz y es un recuerdo tendré para toda la vida.
Pregunta: ¿Cómo has vivido este último torneo? ¿Con qué momento te quedarías?
Respuesta: Este ha sido un torneo que he vivido con muchísimas ganas, sobre todo porque ha sido mi primer torneo presencial. El año pasado estuve en dos torneos de debate, pero fueron torneos online, y el debatir por primera vez presencialmente ha sido una sensación increíble. Es cierto que uno puede estar un poco nervioso al enfrentarse a un torneo presencial, pero personalmente cuando terminé mi primera introducción en el primer enfrentamiento los nervios desaparecieron por completo ya que vi que suponía tal dificultad debatir presencialmente y que, habiendo trabajado tanto, estaba allí para disfrutar y no para está nervioso.
Como momento especial del torneo me quedaría con el debate de cuartos de final contra el equipo Ingrid Betancourt. Este debate era un enfrentamiento que no me esperaba porque en un principio no iba a haber cuartos de final, pero me gustó especialmente este momento porque fue un debate del que salí muy orgulloso personalmente de las intervenciones que realicé. Al finalizar ese enfrentamiento salí con la sensación de haber hecho una buena introducción, una muy buena lectura del debate y especialmente una conclusión que a nivel personal me produjo mucha satisfacción, lo que hizo que este momento sea el mejor del torneo para mí.
Pregunta: En este torneo te ha tocado hacer dos intervenciones, tanto introducción como conclusión. Además, también has probado en anteriores torneos la segunda refutación. Si tuvieras que elegir una, ¿con qué intervención te quedarías?
Respuesta: Tengo la suerte de que las tres intervenciones que he realizado en los torneos a los que he asistido han sido tres intervenciones que he disfrutado mucho. La introducción es una intervención que he tenido la oportunidad de realizar tanto en la modalidad online con la modalidad presencial y en ambas me lo he pasado muy bien, es una intervención que para mí es clave para que un equipo pueda realizar un buen debate y una intervención que me gustaría repetir en futuros torneos a los que asista.
La segunda refutación la considero mi intervención favorita, sobre todo porque es una intervención que creo que se adecúa mucho tanto a mi personalidad como a mi forma de debatir y es una intervención que estoy seguro de que volveré a realizar en futuros torneos.
Y, por último, la conclusión es una intervención que no me enamoraba a priori, pero que a la hora de debatir he disfrutado realizándola, siendo una postura que me ha sorprendido gratamente porque nunca podría llegar a pensar que me pudiese gustar tanto. He tenido la suerte de que mis formadores han confiado en mí como buen conclusor y a día de hoy es una intervención una postura que no me importaría repetir en los futuros torneos a los que asista.
«Me muero de ganas de repetir una experiencia como la de este último torneo.»
Pregunta: Este es tu segundo año como debatiente y en cada torneo vas creciendo más ¿Cuál es el próximo torneo que tienes en mente?
Respuesta: Después del II Torneo Interno ADUMA y de los resultados cosechados en este torneo, el próximo que tengo en mente es el próximo para el cual tenga la disponibilidad de tiempo necesaria para preparármelo bien, porque con las ganas ya cuento. Creo que para realizar un buen debate, para realizar un buen papel en un torneo, es necesario que uno trabaje y que tenga tiempo para poder practicar mucho y para poder trabajar la línea con la que un equipo va un torneo, así que para el próximo torneo en el que disponga de buena disponibilidad será el torneo al que al que asista porque me muero de ganas de repetir una experiencia como la de este último torneo.
Pregunta: Habiendo debatido en ADUMA tanto este año como el pasado, ¿Junto a qué personas de la asociación te gustaría debatir en próximos torneos?
Respuesta: Personalmente he tenido la suerte de que, en este tiempo en el cual llevo debatiendo siempre he tenido grandes compañeros de equipo, personas que más que compañeros de equipo a día de hoy las considero mis amigos. Cuando uno está un mes trabajando con un grupo de personas y está un mes sin parar de hacer formaciones, pasas mucho tiempo con estas personas, y eso crea un nivel de confianza que con facilidad se traduce en amistad, y es lo que me ha pasado a mí con mis compañeros.
Respondiendo a la pregunta, en futuros torneos de debate me gustaría asistir con mis compañeros de clase y de asociación Ángel Montosa y Álvaro Aguayo. Son dos personas las cuales considero unos grandes debatientes y grandes personas con los cuales he tenido la suerte de debatir en contra, y estoy seguro de que en futuros torneos podremos compartir equipo, y a quién no le gustaría debatir en el mismo equipo que estos dos grandes debatientes.
Pregunta: Mirando hacia el futuro ¿Te gustaría probar alguna faceta en especial dentro del mundo del debate como juez o formador?
Respuesta: Me haría mucha ilusión ser juez porque creo que juzgar un torneo de debate es una gran responsabilidad ya que estás valorando el trabajo que muchas personas han realizado durante un mes, un trabajo al cual las personas le han puesto muchas ganas y creo que es una gran responsabilidad la cual estaría encantado de asumir e intentaría hacerlo lo mejor.
También, cómo no, me encantaría formar a un equipo de debate. Creo que esta sería todavía una responsabilidad más grande que juzgar un torneo porque ya no solo serían dos días de responsabilidad, si no más de un mes entero donde tienes que ayudar a tu equipo, en que le tienes que transmitir tus ganas debatir y una confianza para que el equipo trabaje mejor. Sin duda sería algo increíble para mi ser tanto juez de un torneo como formador de un equipo en un futuro.
Pregunta: ¿Alguna reflexión final que quieras compartir con tus compañeros?
Respuesta: Como reflexión final me gustaría agradecer tanto a todos mis compañeros de la asociación como a la Junta Directiva y decirles que son lo mejor, que son “la hostia” y que esta asociación no sería no sería nada sin ellos. En este último Torneo Interno de ADUMA si me lo he pasado tan bien ha sido gracias a ellos porque, si debatir ya es divertido, debatir con amigos creo que es de las mejores sensaciones que uno puede tener.
Para concluir simplemente decir cuando uno va a la primera clase de ADUMA y se dice que esta asociación es una familia, te cuesta creerlo, pero después de dos años he podido confirmar que esto es una realidad y que es algo irrefutable. Apuntarme a esta asociación ha sido la mejor decisión que he tomado en los últimos años, y solo me queda decir: ¡A debatir y a pasárselo bien!