En el Adumeros de hoy tenemos con nosotros a Esteban Romero, finalista y Mejor Orador del III Torneo Interno ADUMA.
Junto a Federico Vallés formaban el equipo Nietzsche, y consiguieron llegar a la gran final donde perderían frente al equipo Sócrates.
Para Esteban, este es su segundo curso en el ámbito universitario, tanto en el grado de Finanzas y Contabilidad en la UMA como en ADUMA, donde ha comenzado de manera espléndida tras un gran primer año en el que participó en 3 torneos.
Hoy nos cuentan cómo ha sido su gran experiencia en el III Torneo Interno ADUMA y nos habla sobre su prometedor futuro en el debate.
Pregunta: ¿Cómo has vivido tu cuarta experiencia en un torneo de debate en este III Torneo Interno? ¿Cuáles eran tus expectativas antes del mismo?
Respuesta: Ha sido genial. He conocido a un montón de personas maravillosas, que han hecho que el evento sea mucho más divertido y enriquecedor. Una de esas personas es mi compañero Federico Vallés. Él me inspiró mucha seguridad antes y durante la preparación del torneo, por lo tenía grandes expectativas sobre lo que iba a suceder, que se han cumplido con creces.
Pregunta: Has conseguido el premio individual a mejor orador, ¿Qué se siente? ¿Qué tienes pensado hacer con los premios de ESESA y MásQuePalabras?
Respuesta: Se siente alivio. Alivio porque el trabajo y la constancia han dado sus frutos, y eso siempre genera satisfacción. Sin embargo, tengo muy presente que este premio significa que lo hice bien entonces, pero no que ya he obtenido la perfección. Me sirve como motivación e inspiración y así seguir mejorando aún más año tras año.
ESESA ofrece másters muy interesantes, por lo que su premio lo usaré para financiar uno de éstos cuando acabe la carrera. Con respecto a +QP siempre estoy ansioso por comenzar sus nuevos cursos, y se oye por ahí que se viene un curso muy interesante, así que os podéis imaginar cómo me encuentro: con unas ganas brutal de asistir.
Pregunta: Además, tu compañero de equipo también se hizo con el premio a mejor R1 y juntos llegasteis a la final del torneo. ¿Cuáles crees que han sido la clave de vuestro éxito?
Respuesta: En primer lugar, ha sido fundamental la sabiduría de nuestro sensei Daniel Martín. Es un crack en oratoria, una persona muy inteligente, por lo que sus recomendaciones y orientaciones nos hacían estudiar, analizar y comunicar de la mejor manera posible.
Y en segundo lugar, se encuentran el trabajo individual y en equipo. Durante las últimas dos semanas estuvimos leyendo sentencias del Tribunal Constitucional, así como otros textos jurídicos, y estuvimos dándole muchas vueltas a los argumentos, de forma que fuesen lógicos y fáciles de entender. Todo ese tiempo de estudio resultó en un dominio del contenido, lo que hizo que realizáramos mejores refutaciones, preguntas y conclusiones.
En definitiva, unos buenos jugadores acompañados de un excelente entrenador siempre llegan a hacer grandes jugadas.
Pregunta: Has doblado en este torneo, haciendo las Introducciones y las Conclusiones, ¿Cómo ha sido la experiencia de hacer dos posturas en un mismo debate?
Respuesta: Es más complejo y tedioso, ya que debes estar a más cosas y estudiar mucho más. Sin embargo, es algo alcanzable y que he disfrutado muchísimo.
Pregunta: Has demostrado ser un crack en la intro y en la conclu, ¿Pero tienes pensado probar en un futuro alguna refutación?
Respuesta: Lo tengo pendiente. Las refutaciones me gustan porque están, digamos, en pleno campo de batalla, teniendo que responder las preguntas y tirar la línea del equipo contrario de forma elegante y eficaz. No sé cuál de las dos R’s es la mía, ya se verá con el tiempo.
Pregunta: ¿Tienes pensado apuntarte a algún (o más de un) torneo en este segundo cuatrimestre?
Respuesta: Está por ver. Este primer cuatrimestre he participado en dos, lo que ha hecho que deje de lado, en muchas ocasiones, mis responsabilidades en la carrera. Está claro que voy a ser más selectivo en los torneos, fijándome cuidadosamente en la pregunta y en los compis para hacer equipos.
No lo tengo claro pero no lo descarto, por supuesto, porque me encanta vivir la experiencia de un torneo y se aprende muchísimo.